… con dolor en mi
corazón,
tambaleando por el mundo,
en busca del mismo infierno,
o de un rincón tranquilo
con sauces o flores de azahar
para calmar mi tempestad.
tambaleando por el mundo,
en busca del mismo infierno,
o de un rincón tranquilo
con sauces o flores de azahar
para calmar mi tempestad.
No quiero dulces y
golosinas,
ni mil flores de colores,
amor mío, solo quiero,
quiero que abraces mi alma,
que beses mi corazón para,
para estar contigo bajo la luz
de mil velas que brinden sus llamas
a los que se fueron, a los que están
y a los que vendrán a sujetar en sus manos
nuestros suspiros y nuestros momentos,
y leerán en voz alta, bajo todos los cielos,
que nuestro amor fue y es eterno …
01/11/2012 Tomás Mielke (Estepona) ©
ni mil flores de colores,
amor mío, solo quiero,
quiero que abraces mi alma,
que beses mi corazón para,
para estar contigo bajo la luz
de mil velas que brinden sus llamas
a los que se fueron, a los que están
y a los que vendrán a sujetar en sus manos
nuestros suspiros y nuestros momentos,
y leerán en voz alta, bajo todos los cielos,
que nuestro amor fue y es eterno …
01/11/2012 Tomás Mielke (Estepona) ©
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5 comentarios:
"...para estar contigo bajo la luz
de mil velas que brinden sus llamas
a los que se fueron, a los que están..."
Quizás esa es la misión que tuvieron con nosotros y lo que nosotros tenemos ahora...
Un hermoso poema Tomás
y es un gusto volver a leerte.
Un abrazo fuerte
Coincido con nuestra común amiga, genessis. Tu poema es verdaderamente hermoso. Un abrazo
Genessis
la misión de los que están es como bien dices, encender las velas porque somos los que podemos recordar, aún, y dejar encendida esa luz para los que vengan y puedan recordarnos como nosotros nos habíamos acordado de ellos, de los que se fueron y de los que vendrán y así lo hacemos constatar, en libros, en películas ... en AMISTAD y AMOR
besos
Gracias Juan
un fuerte abrazo
Opino igual que todo, tiene sun gran talento escribiendo.
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